domingo, 8 de marzo de 2009

Las mayorías perniciosas

Ha calado en la opinión pública la idea de que las mayorías políticas son perniciosas para la democracia. Nada más alejado de la realidad. Baste citar los ejemplos del gobierno de la nación en el que grupos minoritarios, frecuentemente nacionalistas, son el fiel de la balanza, lo que aprovechan en beneficio propio y no siempre en el interés general; o el gobierno autónomo de Andalucía en el que la famosa pinza PP-IU de hace varias legislaturas sumió a la región en una ingobernabilidad siniestra para nuestra tierra.

Pero limitándome al terreno que conozco, el municipal, estoy absolutamente convencido de que los pueblos necesitan mayorías que garanticen la gobernabilidad. Estaremos todos de acuerdo en que un ayuntamiento sin estabilidad política es un gran perjuicio para un pueblo. En Villacarrillo ya tenemos la experiencia de lo que puede ocurrir si el grupo mayoritario necesita apoyo externo. Según las circunstancias, la responsabilidad del minoritario puede sobreponerse a su propios intereses, lo que ha ocurrido en determinadas épocas, pero es frecuente que el proceso derive en un intento de imponer a la mayoría condiciones draconianas. En el mejor de los casos se impondría a la mayoría políticas que sólo ha votado una parte pequeña de la población, y por consiguiente con la no aprobación de la mayoría de los ciudadanos, y en el peor de los casos llega al chantaje político con peticiones desproporcionadas de poder, influencia y decisión. Voracidad que no suele tener fin y que crece como una bola de nieve que acaba ineludiblemente con el plante del grupo mayoritario y la toma de represalias por el minoritario en forma de bloqueo del ayuntamiento sin importar las consecuencias nefastas que tiene sobre todos los aspectos de la vida política, social y económica del pueblo. Lo que conculca cualquier principio democrático de igualdad de voto, pues no es de recibo que un voto del grupo minoritario pueda tener más fuerza en el Ayuntamiento que el de 15 ciudadanos del resto de partidos.
Soy partidario, en la linea de una fuerte corriente de opinión, de reformar la ley electoral para garantizar la estabilidad y la mayoría suficiente que permita que el equipo de gobierno ejecute las políticas que ha votado la mayoría del pueblo, sin lastres ni chantajes políticos, bien sea mediante un procedimiento de doble vuelta o de cualquiera de los que ya funcionan en otros países europeos. Eso si, acompañado con un aumento de la transparencia y el control sobre los equipos de gobierno, que impida tentaciones absolutistas y permita a la oposición participar y fiscalizar la labor de gobierno.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo que pasó con Izquierda Unida en Villacarrillo fue de verguenza, que cuatro interesados por su propio beneficio controlasen a todo un pueblo fue de juzgado de guardia, y el PSOE entró por el aro, y la oposición tres cuartos de lo mismo. Aunque reconozco que al principio daba muy buena impresión, al final eso parecía una merienda de negros, donde unos cuantos no tenían hartura, vamos eso del comunismo de que hay que repartirlo todo, pero que me toque todo a mi. Menudos comunistas.

Anónimo dijo...

Pues yo creo que los de IU tienen tanto derecho como cualquiera a los beneficios que pueda dar el ayuntamiento y que la gente se ha ensañado con ellos, sobre todo los socialistas. Eduardo Muñoz es un gran político y que también tiene que comer y es lógico que si puede tener un trabajo digno pues lo tenga, sin que eso influya en lo que hiciese en el ayuntamiento. Y los comunistas como los llamais han tenido trabajo u otras cosas por el ayuntamiento, pues como cualquiera.

Anónimo dijo...

Como tu dices como cualquiera no, que cuando estaba Eduardo Muñoz eran los que siempre salian a trabajar y los que siempre les tocaba todo lo bueno. Abusaron lo que no esta escrito, se pasaron tres pueblos y lo acaparaban todo, y desde luego algunos no han dado ejemplo de austeridad. Y yo escuchaba a algunos en el bar que frecuentan diciendo barbaridades como que Villacarrillo iba a pasar por el forro de ..... por que tenian la sarten por el mango.

Anónimo dijo...

Las gentes de Izquierda Unida son familias humildes que necesitan de ayuda para sacar la cabeza, y si te parece mal que se les heche una mano pues estás muy equivocado.

Anónimo dijo...

iu en marinaleda y lo que hay en este pueblo